Mar Muerto
Visita al Mar Muerto
Mar Muerto
- ¿Por qué se llama Mar Muerto?
Existen dos motivos principales: la particular composición mineral del agua y la supuesta existencia en sus orillas de las ciudades de Gomorra y Sodoma. Dejando de lado creencias personales a día de hoy sigue sin encontrarse evidencia de que existieran dichas ciudades en las orillas del Mar Muerto, quedando los manuscritos de Qumran como único hallazgo documentado.
Es en la salinidad del agua donde encontramos la auténtica razón. La alta concentración de calcio, magnesio, potasio y bromo junto a la baja concentración de sodio, sulfatos y carbonatos hace imposible que se desarrolle la vida en sus aguas. También es el motivo de que los seres humanos flotemos sin llegar a hundirnos de forma natural: la densidad del agua es mayor que la del mar. Este particular fenómeno ha propociado que muchos turistas acudan para disfrutar de una playa única en el mundo.
Flotando en el Mar Muerto
Como curiosidad, se ha descubierto que realmente sí hay vida en el Mar Muerto, aunque nosotros probablemente no nos percatemos de ella. Las artemias, minúscrulos cretáceos procedentes del periodo triásico viven en entornos de alta salinidad como es el del Mar Muerto. El mayor tamaño registrado es de 1,45 centímetros, siendo más pequeños cuanta más salinidad hay en el agua; pueden llegar a medir apenas 3 milímetros.
- Un balneario natural terapéutico
El turismo del Mar Muerto no solo vive de las formaciones salinas que se crean a su alrededor y dentro del lago. Las sales del Mar Muerto son beneficiosas para nuestra salud, con propiedades relajantes, factores nutritivos para la piel y efectos positivos sobre la circulación sanguínea. Si somos aficionados a los balnearios todos estos efectos los conoceremos, solo que en vez de tener que hospedarnos en un recinto estaremos al aire libre disfrutando de un pedazo de historia latente en la actualidad.
Esta característica no ha pasado ajena para el turismo, encontrando complejos hoteleros y balnearios naturales en la zona norte del Mar Muerto. Podremos alojarnos en multitud de hoteles y residencias donde nos ofrecerán masajes terapéuticos, masajes de barro procedentes de la orilla del lago y circuitos completos mezclando zambullidas, masajes y ejercicios contemplativos.
Playa Mar Muerto
Si queremos un viaje más personal podemos acudir a las playas públicas, dotadas de socorrista, duchas, tumbonas y medidas de seguridad básicas para que podamos bañarnos sin riesgo alguno. Son gratuitas, dispondremos de locales donde tomar un refrigerio y podremos descansar en la propia playa mientras nos damos un chapuzón tras otro.
- Mucho más que un lago
Nuestra visita al Mar Muerto puede complementarse con la parte más histórica visitando
Qumran, el lugar donde se encontraron los manuscritos de 1947. Se trata de una serie de cuevas accesibles para el público al haber sido ya completamente investigadas. Tendremos que acudir en taxi o animarnos a una ruta de senderismo completa. Eso sí, de elegir esta última opción es importante ir con guía ya que a pesar de estar a 2 kilómetros del mar muerto la zona no está bien señalizada.
Cueva en Qumran, Mar Muerto
La Reserva natural de Ein Gedi debería ser nuestra siguiente parada, sobre todo si estamos interesados en el senderismo. Repleto de formaciones naturales encontraremos pequeñas cascadas, riachuelos atravesando la roca, vegetación imposible con el desierto que rodea la zona y hasta manantiales de una belleza extraordinaria. Además se encuentra el balneario más importante de Israel, pudiendo llegar a la zona con los autobuses públicos que parten de la zona de Egged.
Artículo escrito por RANKTOP
