Castillo de Praga
Praga Turismo
El complejo que conforma al Castillo de Praga abarca desde grandes palacios y edificaciones eclesiásticas, hasta cárceles y laboratorios para los alquimistas, conectados por callejones pintorescos que sintetizan la majestuosidad y valor artístico de esta importante construcción histórica. El complejo cuenta con una extensión de aproximadamente 70.000 m2 , por lo que se hace necesario disponer de varias horas para realizar un recorrido a través de ésta imponente construcción, que aun cuando fue renovada entre 1.920 y 1.934 por el arquitecto Jože Plečnik, conserva la estética con que fue concebida.
• ¿Cómo y cuándo visitar el Castillo de Praga?
Desde las caminatas por las vivas callejuelas, ya puede apreciarse la magnificencia del complejo, el cual abre sus puertas al público en la temporada de invierno (del 1 de Noviembre al 31 de Marzo) desde las 06:00 hasta las 23:00 horas, y en la temporada de verano (que abarca desde el 1 de Abril hasta el 31 de Octubre) desde las 05:00 hasta las 00:00 horas. Los monumentos históricos están abiertos diariamente, excepto el 24 de Diciembre, y el horario de visita varía según la temporada y el monumento que se desea visitar.
Una de las maneras de llegar es utilizando la línea 22 del tranvía, parada Prazsky Hrad; otra es por el metro, línea verde A, estación Malostranská.
Un factor importante en la visita a Praga es el clima, que varía drásticamente según la estación del año. Aunque se recomienda viajar en época de verano para aprovechar que los días son más largos y hacer con mayor calma los recorridos turísticos, cabe destacar que esa es también la época más lluviosa del año, y que por lo general el calor viene acompañado de una sensación de mucha humedad.
• Lugares para visitar en el Castillo de Praga
El Antiguo Palacio Real de Praga, “Starý Kralovský Palac”, se constituye de un romántico castillo fabricado en su mayor parte de madera, que data de aproximadamente los siglos IX y X, con posteriores reacondicionamientos, que le otorgan su hermoso aspecto actual. Es la sede histórica de los reyes de Bohemia; en él resalta la sala Vladislav, salón de ceremonias que deslumbra tanto por su belleza como por sus extraordinarias dimensiones, así como por la imponente bóveda que posee y que lleva como elemento decorativo fundamental deslumbrantes rosetones. La sala Vladislav, que en otro tiempo fue lugar de suntuosas celebraciones, audiencias reales, asambleas y bailes, es actualmente donde se celebran las elecciones presidenciales así como sede de importantes eventos de estado. Desde ésta sala se tiene acceso, a la terraza exterior, a la Capilla de Todos Los Santos, la Sala de la Dieta y la Sala de los Registros. En la Sala Vladislav se puede disfrutar también de una exposición permanente acerca de la historia del Castillo de Praga.
También se encuentra en las inmediaciones del Castillo, un Nuevo Palacio Real (Nove Kralovsky Palac), reconstruido a mediados del siglo XVIII por la reina María Teresa, unificando la construcción original, formando un anillo. Comprende cuatro alas, designadas según su ubicación en los puntos cardinales. En este Palacio funcionan los despachos presidenciales y administrativos de la República Checa. Aunque estos espacios no están abiertos al público diariamente, hay dos días de excepción en el calendario de funcionamiento del Catillo de Praga: el primer sábado siguiente al 8 de Mayo, en recuerdo de la liberación del fascismo y el primer sábado siguiente al 28 de Octubre, día del establecimiento de la República Checa.
El Callejón del Oro es una corta y angosta calle, conocida por muchos por estar allí situada la casa número 22, donde vivió el escritor Franz Kafka entre 1.916 y 1.917. Ésta callejón también es conocido como “Calle de los Alquimistas” y está alimentado de mitos acerca de los experimentos realizados por astrónomos y científicos de la época de la corte de Rodolfo II. El Callejón del Oro es ataviado por los vivos colores de las casitas que se encuentran en su trayecto, donde actualmente se ubican tiendas de artesanías y recuerdos de la visita al Catillo de Praga.
La Torre Blanca y la Torre Negra son también edificaciones singulares en las inmediaciones del Castillo, siendo la conocida de ésta manera la segunda por sufrir un incendio y quedar por ello ennegrecida. Ambas torres fueron utilizadas como cárceles, la “Blanca” para miembros de la nobleza y la “Negra” para deudores. Otra famosa Torre es la Daliborka, que en un primer momento se utilizó para apresar a miembros de la nobleza; con el transcurrir del tiempo fue utilizada como lugar de reclusión para reos comunes.
Entre las edificaciones eclesiásticas, se encuentran la Catedral de San Vito, que es símbolo de Praga y de toda la República Checa, así como la Basílica de San Jorge, fundada en el 920 y ampliada en el 973 con la construcción del Convento que lleva el mismo nombre.
Pero el Castillo de Praga tiene todavía más para admirar, como sus jardines, que son de acceso libre durante la temporada de verano; también puede contemplarse el Jardín Real, que se encuentra al norte del Castillo y el Belvedere, que se encuentra al extremo este del Jardín. El Belvedere constituye una hermosa edificación renacentista, que se dice, fue un regalo de Fernando I a su esposa Ana. En él funcionó por un tiempo un observatorio donde trabajaron famosos astrónomos. Otro atractivo con el que cuenta el Castillo es el cambio de guardia
La visita al Castillo de Praga es una experiencia tanto placentera como enriquecedora, pues su historia en conjunto a la belleza del legado artístico que alberga, le otorga el merecido título de Perla de Europa.