Cómo moverse en Bali

Con el transporte Bali nos muestra una de sus sombras en nuestro idílico viaje: moverse a lo largo de la isla es realmente complicado, sobre todo si hemos asumido las comodidades habituales en cuanto a transporte que nos ofrecen otros destinos turísticos. Ya sea con los servicios públicos como con las ideas que improvisemos en persona tendremos que estar concienciados previamente que la sencillez no es la palabra que definirá esta parte de nuestro viaje.

• El transporte público de Bali
Coger el transporte público en Bali es buena opción sobre todo si tu idea es añadir algo de aventura a tus vacaciones. Son seguros y realmente económicos pero distan mucho de los autobuses a los que estamos acostumbrados. La mayoría no tienen aire acondicionado y transportan una cantidad ingente de personas, siendo relativamente agobiantes si no estamos acostumbrados. Además tendremos que informarnos directamente en la isla sobre horarios y paradas que hacen, dificultando nuestro viaje si vamos ajustados de tiempo.

Particularmente llamativas son las llamadas Bemos, una mezcla entre un autobús público y una furgoneta Vans que recorren las zonas más rurales a un precio escandalosamente bajo. Son ideales si queremos profundizar un poco en la cultura de la isla al etar con la gente de a pie. Más exóticas todavía son las Dokar, carretas de caballos que aunque han ido reduciendo su número con los años siguen estando disponibles en la urbe para trayectos cortos.

• Taxis y su particular forma de trabajar
Antes de coger un taxi en la isla tenemos que aceptar que no funcionan como los taxis de cualquier ciudad al uso. Hay pocos taxis oficiales y suelen estar solamente por las zonas más turísticas. Sin ser caros no dejan de ser los clásicos taxis con tarifas que pueden dispararse sin apenas darnos cuenta. Recomendables para desplazamientos muy concretos y con mucho equipaje.

Es en los taxis urbanos donde encontramos la Bali más pura, teniendo que regatear con los conductores antes de partir. Ya sea un coche o una simple moto estos taxistas sin licencia están desperdigados por toda la isla, siendo un buen recurso cuando nos hemos cansado de caminar. Por supuesto el regateo está fuera de todo control por lo que en nuestras manos quedará sacar un auténtico chollo o que nos salga solo un poco más barato que un taxi oficial.

• Alquilar un vehículo
De las mejores opciones, tanto con chófer como conduciéndolos nosotros mismos. La libertad de movernos como queramos solo la conseguiremos si nos animamos a ponernos al volante, pero cuidado: conducir en Bali puede ser una idea, no para todo el mundo. Su sentido es contrario y los conductores en la ciudad suelen ser alocados e imprevisibles, además de unas carreteras que no siempre están en el mejor estado posible. No significa que vaya a pasarnos nada pero sí puede convertirse en un quebradero de cabeza. Si decides alquilar un vehículo la mejor opción sea quizás, la de un ciclomotor.

Una fantástica opción es contratar un coche privado con guía. Mientras alquilar el coche puede costarnos unos 40 euros diarios incluir un chófer, que además nos hará de guía, apenas subirá a 45-50 euros. De las mejores opciones posibles, son conductores avezados que conocen la isla y nos llevarán mucho más rápido a todos los rincones. Si optamos por esta opción es muchísimo mejor negociar el paquete completo que hacerlo por separado a menos que tengamos referencias personales muy buenas de alguien concreto.